La portavoz adjunta del Partido Aragonés (PAR) en las Cortes, María Herrero, ha presentado una Moción para que el proceso iniciado parta del documento resultante de las ponencias desarrolladas en la pasada legislatura. Así, Herrero considera que el documento de base planteado en el seno de la FAMCP «no es el apropiado. «Un texto con una visión sesgada de la realidad de Aragón y del modelo territorial que nos hemos dado, no puede ser validado como documento de partida».
La portavoz adjunta del PAR en las Cortes, María Herrero, ha presentado una Moción para su debate en el Pleno de la Cámara para que en el proceso iniciado para la reordenación de responsabilidades administrativas entre las entidades locales se cuente como documento de partida con el concluido por la ponencia especial y la ponencia legislativa desarrolladas durante la legislatura pasada.
Herrero expone en la Moción que sobre «estos documentos», consensuados por la práctica totalidad de los Grupos Parlamentarios existentes en el momento, «se podrán aportar cuantas sugerencias se considere por parte de las instituciones afectadas y, además, se deberá promover la participación en este proceso de los Grupos que actualmente están en el Parlamento».
Así, el PAR no considera apropiado el documento de base planteado en el seno de la FAMCP dado que, según explica Herrero «está muy alejado de las tesis sobre las que podría encontrarse el consenso».
Antecedentes
La impulsora de la iniciativa, María Herrero, recuerda que en la legislatura pasada, en la ponencia especial, se partió de un documento de distribución de competencias elaborado por la FAMP sobre el que se trabajó durante muchas sesiones llegando a un listado pormenorizado de responsabilidades que idealmente deberían ser atribuidas a cada administración con el acuerdo de la totalidad de los Grupos Parlamentarios que participaron ‘activamente’. A su vez, subraya, el texto articulado de la ponencia legislativa posterior «asumió íntegramente la propuesta de texto acordada en la ponencia especial». Cabe resaltar, indica, que los trabajos «avanzaron» tras numerosas reuniones buscando el acuerdo y el máximo consenso posible, «a pesar de que los Grupos proponentes contaban con la mayoría parlamentaria». Finalmente no vio la luz la Proposición de Ley «por el único escollo no salvado de reducir o no el número de consejeros, pero es importante subrayar que todo lo demás estaba pactado y acordado».
Nuevo escenario político
El nuevo escenario político, con formaciones en el Parlamento que no estaban en su momento, parece aconsejar, según la diputada, que se retome «el proceso para lograr encuentros con ellas o, al menos, que tengan la oportunidad de manifestar sus puntos de vista. Incluso sería conveniente que el partido que no quiso llegar a acuerdos en la legislatura pasada pudiera repensar su postura para participar constructivamente en esta búsqueda de consensos».
El diseño de nuestro modelo de organización territorial, indica Herrero, «es un asunto de tal calado que es necesario abordarlo con la voluntad política de todas las fuerzas de cesión y de acuerdo». Recuerda que el modelo que tenemos «fue aprobado mediante 36 leyes por unanimidad y sería una irresponsabilidad no aspirar a mantenerlo».
Documento presentado en la FAMCP
Se ha tenido conocimiento del documento que se ha presentado en el seno de la FAMCP como texto base de partida para iniciar el proceso de reordenación de responsabilidades administrativas entre las entidades locales. Dicho documento está plagado de juicios de valor, inexactitudes, prejuicios, afirmaciones con una percepción sesgada de nuestro modelo de organización, opiniones políticas y visión partidista de la realidad, interpretaciones tendenciosas de la legislación vigente, falta de respeto al Estatuto de Autonomía y omisión de la Disposición Adicional 3ª, en su punto 3, de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, en la que se reconoce nuestra singularidad por nuestro modelo propio.
Especialmente llama la atención en este texto la voluntad denostar y hacer desaparecer las comarcas, que son «fundamentales para garantizar la prestación de servicios a las personas que viven en el medio rural». «No es posible apostar realmente por abrir un proceso que busque el consenso si, como punto de partida, se plantean ideas con las que tan solo un Grupo puede sentirse identificado».