El Partido Aragonés de Teruel exigirá la mejora de la N-330 "gobierne quien gobierne en Madrid" tras las elecciones

El Partido Aragonés de Teruel exigirá la mejora de la N-330 "gobierne quien gobierne en Madrid" tras las elecciones

Alcaldes del Partido Aragonés del entorno de esta carretera y cargos institucionales como el presidente de la Diputación de Teruel, Ramón Millán, se unieron ayer a la reunión de alcaldes que tuvo lugar en la localidad turolense de Libros para exigir el arreglo de esta vía que une Aragón con Castilla-La Mancha. El Partido Aragonés volvió a exigir ayer el acondicionamiento del tramo de 36 kilómetros que une Teruel con la localidad valenciana de Torrebaja a través de la N-330 como ya hizo a mediados del pasado mes de octubre de 2015.

Alcaldes del PAR del entorno de esta carretera así como cargos institucionales del Partido Aragonés con el presidente de la Diputación de Teruel y secretario general del comité intercomarcal de la provincia, Ramón Millán, a la cabeza se unieron a esta reivindicación convocada por los 13 municipios por los que transcurre la N-330 y que tuvo lugar en la localidad turolense de Libros.

«El PAR y yo personalmente vamos a apoyar todas las movilizaciones que exijan el arreglo de esta vía gobierne quien gobierne en Madrid tras las Elecciones porque entendemos que hay que dar una solución urgente a esta carretera y desde luego, no se puede quedar en la simple lectura de un manifiesto», asegura el secretario general del PAR en la provincia y presidente de la Diputación de Teruel, Ramón Millán.

El PAR recuerda que la N-330 ha registrado desde el año 2.000 más de 300 accidenteS con el balance de 80 heridos y 5 personas muertas.

Además, el Partido Aragonés recuerda que «se trata de una vía estrecha, sin arcenes y llena de curvas muy cerradas en las que la velocidad máxima permitida son 40 kilómetros por hora». Esta circunstancia provoca que «en muchos tramos un turismo no puede adelantar a los muchos camiones que circulan por allí, con lo que el conductor no alcanza la velocidad media de 50 kilómetros por hora». Por otra parte, «el tráfico pesado tampoco puede circular mucho más deprisa».

A todo ello se suman las travesías urbanas en Villastar, Villel y Libros, con limitaciones de velocidad a 30 kilómetros por hora.

El proyecto de la autovía A-40 que vendría a sustituir a la N-330 arranca en los años 90 del pasado siglo aunque fue en 2008 cuando sufrió un duro revés con el estudio de impacto ambiental negativo que ha terminado por dejar abandonado un proyecto que el PAR defiende desde sus orígenes.

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