Ideas y Renovación

(Comunicación de Presidencia del partido)

En apenas dos semanas hemos alcanzado, prácticamente, el ecuador de la primera fase informativa del proceso de renovación. Ya hemos mantenido reuniones en casi la mitad de los comités comarcales y los locales de Zaragoza, Calatayud, Barbastro, Alcañiz, Huesca… Reuniones que han sido sumamente participativas y tras las cuales comenzará el trabajo verdaderamente importante como es la elaboración de propuestas.

Ahora lo que toca es reflexionar, debatir, renovar ideas para generar el proyecto político más ambicioso que podamos, tanto internamente, como de cara a la sociedad. Y ahí es necesaria la implicación de todos y cada uno de los militantes por lo que es importante que, ahora, los comités sean permeables con la militancia de base o incluso con los simpatizantes que nos hagan llegar sus propuestas. Nadie debe rehuir esa responsabilidad. Por ejemplo, se ha recibido ya algunos documentos tras el comité local de Zaragoza, lo cual es de agradecer al tiempo que se anima a utilizar la comunicación con la Presidencia para realizar aportaciones.

En este proceso, lejos de tutelar nada ni a nadie, la Presidencia del partido se limita a convocar a los órganos e impulsar ese proceso de regeneración doctrinal y de renovación de personas, que empieza por la propia Presidencia que, de esta forma, dispone incluso de mayor legitimidad para hablar con claridad debido a la ausencia de interés directo en los resultados, salvo la responsabilidad de llevar este barco hasta el puerto de la mejor forma posible, evitando cualquier problema o borrasca. Será la manera de catalizar y propiciar una reacción en cadena, pero corresponde al trabajo de los cargos y afiliados y a éstos, diseñar el partido de 2015.

Nos encontramos en la fase más trascendente, la de captación de ideas y entorno a ellas deben establecerse los debates. Aunque haya quien quiera correr más de lo debido, no es época para hablar de personas, lo que llevaría a desgastar a alguno por el camino. Eso sucederá más adelante, cuando el partido haya adquirido músculo suficiente como para elegir a los equipos más capacitados. Por el momento, este debate tan sólo aporta morbo y espacio para medios de comunicación, pero debilita a nuestra formación que debe estar ahora centrada en un proceso que ningún otro partido ha emprendido con tanta profundidad. El liderazgo se reconoce por el resto de compañeros, porque, siendo necesaria la vocación de ejercerlo, ésta no es condición suficiente.

Tras las primeras reuniones, las sensaciones halladas en el seno de los comités son muy positivas, lo que demuestra el vigor interno del partido y el éxito seguro de este proceso de regeneración, renovación o reforma, que recupera el sentido de nuestra última letra en las siglas.

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